Educa a una putita asiática para que sea su esclava sumisa
Este hombre siempre soñó con ser poderoso para poder tener todo lo que quisiera en la vida y ahora que tiene dinero a montones ya sabe qué es lo primero que quiere: una esclava sumisa. Ha buscado la mejor nacionalidad que podía para ello: una china que está dispuesta a hacer todo lo que le pida, a dejarse poner correa y a que la folle a diario de forma brutal utilizándola como una puta. Su vida es mejor desde que es una sumisa, sobre todo porque se la folla con mucha fuerza y el tío tiene una polla gorda que atraviesa ese coñito prieto de manera extrema.