Colegiala llega a casa con ganas de follarse a su hermano
Mazy Myers ha vuelto a casa corriendo porque sabe que en ella no había nadie más que su hermano. Y la zorrita lleva bastante tiempo fantaseando con el día en el que pueda sentir el rabo de su hermano dentro de su joven y apretado coño. Al final no se aguanta más y le baja los pantalones para ver el rabo que tiene, a lo cual responde con una cara de sorpresa porque no se lo imaginaba tan grande. A continuación, se tumba en misionero y le dice que la folle, pero que lo haga con cuidado porque la tiene enorme. Cuando su coñito ya se ha acostumbrado, se pone en perrito y así se la folla más a fondo.