Jill Taylor intenta no atragantarse chupando una polla gigante
El nuevo novio que se ha echado Jill Taylor está excesivamente por encima de sus posibilidades en lo que se refiere a comer pollas. La chica lo pasa realmente mal chupando el miembro del negro porque es simplemente gigante. La guarra se la intenta meter y comérsela poco a poco, pero nota con claridad que no hay manera de tragarse semejante polla. Y el problema que tiene es que al tío le encantan las mamadas, así que le dice a la rubia que se prepare y que practique a diario hasta que llegue a chupársela como una auténtica puta y se trague todo el sable.