Adictas a la consola folladas a lo bestia por sus padres
Estos padres están muy serios porque creen que sus hijas son adictas a la consola. Se pasan el día jugando sin parar mientras están en bragas e incluso han comenzado a descuidar su higiene personal. Son zorritas muy putas que solo quieren jugar a la consola, así que sus padres se ponen de acuerdo para hacer algo que nadie esperaría: follárselas. Uno de ellos le quita el mando a su hija y le dice que si la acompaña a su habitación se lo devolverá. Allí la invita a chuparle la polla y la guarra descubre su nueva adicción: el sexo guarro con su padre. Luego la otra también recibe lo suyo y las dos acaban folladas a lo bestia.