Ceporra española demuestra porque las gordas follan mejor y son más putas
Esta ceporra española está preparada para demostrarnos de nuevo que si le damos amor a una gorda, vamos a echar unos polvos de auténtico escándalo. La puta no tiene problema ninguno en irse a comer polla a los baños de varios bares y en cuanto llega a un apartamento ahí se la empieza a follar su amigo en el sofá, reventándola brutalmente. La tía no tiene límite y le gusta recibir polla fuerte y duro en ese gran coño que tiene y en ese culazo que gasta la guarra, el cual da un gustazo agarrar y apretar mientras te la estás follando.