Jovencita pintora de rabos acaba llevandose un buen polvazo
A esta jovencita pintora lo que más le gusta es dibujar enormes pollas en sus obras de arte. Para ello elige a cualquier modelo y hoy a tenido la suerte de tocarle a su vecino. La muy guarra no para de ponerlo cachondo meneándosela bien para que se le ponga la polla bien dura. Al final el cabrón del tío no se aguanta más y la coge bien fuerte contra la pared para comerle su coñito. Luego la pone a cuatro patas y le da buenas embestidas por detrás para que la muy puta sienta lo que es tener un gran rabo metido.