Kim Rose engañada por su compañero de piso para follársela
Kim Rose y su compañero de piso van a pasar el día juntos en casa y en poco rato ya están aburridos. Al chico se le ocurre un juego en el que la putita se venda los ojos y tiene que descubrir qué es lo que está probando en su boca. Él aprovecha para meterle la polla dentro y que se la chupe. Cuando ya ha probado su rabo un poco, la perra quiere seguir chupando y le continúa haciendo una buena mamada. Pero en ese momento su chochito ya está empapado y le está pidiendo polla cuanto antes. Así que se ponen a follar y le pega un buen polvazo a la muy puta hasta que se termina corriendo en toda su cara.