La zorrita Josie se come la polla negra más gigante que ha visto
Josie está viviendo el sueño de su vida al estar en Nueva York, pasearse por los lugares más de moda y luego, por la noche, reunirse con un negrazo para que la folle. Es la vida que siempre ha querido tener: turismo por el día y sexo brutal por la noche. Lo primero que hace es intentar tragarse ese enorme rabo, pero no hay manera de que lo consiga. Por eso, el tío abre su agujero a sabiendas de que la guarra lo tiene bien dilatado y la comienza a reventar de forma dura hasta que la deja totalmente destrozada sin poder moverse.