Madura pelirroja reventada por un negro al que le quiere vender una casa
Por vender una casa y llevarse la comisión esta madura pelirroja haría lo que fuera. Por eso cuando su cliente la comienza a liar y a insinuarse, ella no duda ni un segundo en hacer lo que debe hacer: arrodillarse y meterse el pedazo de pollón que tiene en la boca. Lo cierto es que para la zorra va a ser una victoria doble, porque no solo vende la casa, sino que además echa el polvazo más bestial de su vida, pidiendo al negro que la siga follando fuerte y duro sin parar porque está notando cómo le revienta el chocho.