Manosea el coño de su vecina. ¡METEME LA POLLA YA!
El vecino de esta zorrita con piercings en los pezones y tatuajes, le hace una visita para pedirle una llave inglesa. Pero casi al instante, la tiene desnuda y de rodillas delante de él haciéndole una mamada. Él le devuelve el favor comiéndole el coño y luego se la vuelve a chupar. Pero cuando acaba de mamársela, la zorra le dice que se vaya. Y él está repitiendo «déjame follarte», pero le echa igual. Unos minutos después vuelve a tocar a su puerta, se mete en la casa y le dice que va a follarla y que no va a dejarle con las ganas. La sigue follando hasta que, a cuatro patas, se le termina corriendo dentro del coño.